Vaya con la caló en NY

domingo, julio 24, 2005

~ Destroyer ~
Llevo siglos sin escribir. No sé si será la modorra veraniega o el stress de Nueva York que no me da tiempo para hacer cosas. Al final, con toas las bullas de presentar papeles, firmar cheques y too lo más, los que tienen que vender el apartamento que nos queremos comprar el davi-mari y la menda, no están listos y están esperando a que les llegue una jartá de papeles que tienen que firmar. Un auténtico coñazo.

La verdad es que no ha habío muchas novedades en el frente. El miércoles nos fuimos María y yo a tomarnos un algo en Smörgas, un restaurante nórdico que está cerquita del currele. Allí nos sentamos a hablar, beber vino y reirnos. Reirnos sobre todo recordando la retahila de novios(¿?) destroyers que ha tenío una. Empezando por G., que de mountain-biker, rey de la noche en los bares de Málaga y objetor de conciencia se hizo picoleto... ¡Arrrgggghhhh! María se partía, diciendo que me veía en el cuartelillo con los cinco churumbeles, mientras el susodicho le sacaba brillo al tricornio... Dios mío, ¿qué ha hecho una para merecerse eso? Y no es que tenga nada en contra de la Benemérita, pero realmente, no es que tenga demasiado glamour y no me veo yo de Sra. de comandante tal o cual. Hmmm, de ese novio pasamos revista a algunos de los otros, y realmente, la menda podría ser personaje Almodóvar, porque tengo un ojo clínico... para juntarme con cada destroyer. Y lo peor es que no era guión... ¡era la vida misma! Cualquier parecido con un hecho ficticio es pura coincidencia.

Total, que el jueves quedamos con Manuel y fuimos a un restaurancito mu apañao en el East Village, en el que habíamos estado antes, Via della Pace, para celebrar el cumple de Manuel, que era al día siguiente, pero al que ni María ni yo podíamos ir. Nos lo pasamos fenomenal.

Y hoy, a ver. El Davi-mari se ha ido a Japón a un viaje de negocios, así que creo que voy a salir a darme una vuelta por el barrio y luego por la noche a ver a Cathy.