Vaya con la caló en NY

martes, julio 01, 2008

~¡¡¡CAMPEONES!!!~

El domingo a eso de la 1 nos fuimos too nerviosos a Floyd a ver la final de la Eurocopa... ¡España-Alemania! Y nosotros que llevamos sin ganar 44 años... Qué nervios. Queríamos haber ido a La Nacional a ver el partido allí... ya que siempre vamos allí para comernos las uvas, los 31 de diciembre, a las 6 de la tarde, como que no pega ná y te corta el rollo del día, pero está fenomenal, porque Lolo nos pone la TVE y nos comemos las uvas con toa España. Bueno, a lo que iba, que me enrollo más que una persiana... Que el primer partido, el de España-Suecia lo vimos estupendamente en La Nacional, y claro, con ese ambientazo que hay, queríamos repetir la jugada con el partido España-Italia... tortal que nos fuimos el domingo 22 una hora antes del partido a pillar sitio... ¡¡y no se cabía!! No nos lo podíamos creer, así que nos cogimos nuestro F del alma y de vuelta pa Brooklyn a encontrar algún bar en que echasen el partido. Acabamos en el Angry Wade's pegando voces como descosíos en esa tanda de penaltis...

Total, que el jueves, antes de que empezase el partido de España-Rusia (que lo bordamos con esos 3 golazos...), llamé por teléfono a La Nacional para hacer una reserva por si ganábamos, pues para ver la final allí y si no ganábamos, para quitarnos las penas con unas cuantas tapas... y me dijeron que no podían hacer reserva... Una pena... así que decidimos quedarnos en el barrio y subir a Atlantic Avenue, mu poquito a poco y con una plasta de caló considerable, a ver la final con nuestras camisetas y nuestra bandera. Llegamos de los primeros, vamos, tan de los primeros que el bar no estaba ni abierto. Nos pillamos el sofá y allá que nos colocamos con nuestros amigos y una gente de Granada que estaba de visita por Nueva York a ver el partido. Fue un partidazo emocionante y estuvo interesante el salir a echar un piti en la calle con los que llevaban la camiseta de Alemania. Al final, ese 1-0, golazo de Torres, nos dio una final y la Eurocopa que nos merecíamos.