~Macbeth en Brooklyn~
Anoche fuimos a ver una versión bastante interesante de Macbeth. Sí, el Macbeth de Shakespeare viene estos días a Brooklyn de la mano de la compañía polaca TR Warszawa y presentada en Nueva York por St. Anne's Warehouse. Dirigida por Grzegorz Jarzyna y con los "montes" de Manhattan y los puentes de Brooklyn y Manhattan como telón de fondo, TR Warszawa nos muestra su particular visión sobre esta obra inmortal de ambición, lucha por el poder y muerte.
Por el artículo del New York Times, sabía que era una representación de vanguardia y el saber que se habían vendido todas las entradas para los 12 días en los que se representa la obra en Brooklyn, me llenó más aún de curiosidad por una de mis obras de teatro favoritas.
No es una representación clásica y los que vayan en busca de los monólogos que nos hemos aprendido de memoria aquéllos que hemos estudiado filología inglesa, van listos. Como se representa en el exterior, en el Tobacco Warehouse, y los ruidos del bullicio propio de esta ciudad no dejan que los espectadores puedan disfrutar de la obra, nada más empezar, nos dieron cascos para poder escuchar los versos de Shakespeare recitados en polaco y con subtítulos en inglés proyectados en las paredes de un fuerte militar, lugar en el que se desarrolla la obra. Resulta interesante ver como el idioma no es barrera para esta representación, ya que el polaco parece encajar perfectamente con la trama.
No hay brujas que se pregunten cuándo volverán a verse de nuevo, sino un grupo de soldados que nos recuerdan a la película Black Hawk Down y la obra empieza así, con una emboscada, y podemos ver como Macbeth, acompañado de Banquo, mata y decapita a un enemigo que nos recuerda más a un malogrado Irak y a Abu Gharib que a la campiña escocesa.
Nos presentan el ascenso de Macbeth y como su ansia de poder crece mediante proyecciones, pantallas de televión, música y escenas de circo con un Uncle Sam sacando conejos tipo Donnie Darko de la chistera. Lady Macbeth consigue lavarle el coco a su marido para que haga todo lo que sea necesario para llegar a lo más alto, pero no logra lavar las manchas del crimen de su mente, ni siquiera con dos lavadoras industriales que por un momento me recordaron a la escena de Carmen Maura en Mujeres al borde de un ataque de nervios.
Si podéis ir a verla, la recomiendo, a pesar de que mis amigos americanos les cortó bastante el rollo la parte del Tío Sam sacando conejos de la chistera y la connotación política que Jarzyna le ha dado a la obra.
Anoche fuimos a ver una versión bastante interesante de Macbeth. Sí, el Macbeth de Shakespeare viene estos días a Brooklyn de la mano de la compañía polaca TR Warszawa y presentada en Nueva York por St. Anne's Warehouse. Dirigida por Grzegorz Jarzyna y con los "montes" de Manhattan y los puentes de Brooklyn y Manhattan como telón de fondo, TR Warszawa nos muestra su particular visión sobre esta obra inmortal de ambición, lucha por el poder y muerte.
Por el artículo del New York Times, sabía que era una representación de vanguardia y el saber que se habían vendido todas las entradas para los 12 días en los que se representa la obra en Brooklyn, me llenó más aún de curiosidad por una de mis obras de teatro favoritas.
No es una representación clásica y los que vayan en busca de los monólogos que nos hemos aprendido de memoria aquéllos que hemos estudiado filología inglesa, van listos. Como se representa en el exterior, en el Tobacco Warehouse, y los ruidos del bullicio propio de esta ciudad no dejan que los espectadores puedan disfrutar de la obra, nada más empezar, nos dieron cascos para poder escuchar los versos de Shakespeare recitados en polaco y con subtítulos en inglés proyectados en las paredes de un fuerte militar, lugar en el que se desarrolla la obra. Resulta interesante ver como el idioma no es barrera para esta representación, ya que el polaco parece encajar perfectamente con la trama.
No hay brujas que se pregunten cuándo volverán a verse de nuevo, sino un grupo de soldados que nos recuerdan a la película Black Hawk Down y la obra empieza así, con una emboscada, y podemos ver como Macbeth, acompañado de Banquo, mata y decapita a un enemigo que nos recuerda más a un malogrado Irak y a Abu Gharib que a la campiña escocesa.
Nos presentan el ascenso de Macbeth y como su ansia de poder crece mediante proyecciones, pantallas de televión, música y escenas de circo con un Uncle Sam sacando conejos tipo Donnie Darko de la chistera. Lady Macbeth consigue lavarle el coco a su marido para que haga todo lo que sea necesario para llegar a lo más alto, pero no logra lavar las manchas del crimen de su mente, ni siquiera con dos lavadoras industriales que por un momento me recordaron a la escena de Carmen Maura en Mujeres al borde de un ataque de nervios.
Si podéis ir a verla, la recomiendo, a pesar de que mis amigos americanos les cortó bastante el rollo la parte del Tío Sam sacando conejos de la chistera y la connotación política que Jarzyna le ha dado a la obra.