~Malagueños en el mundo~
Llevo unas semanas desconectada y no por voluntad propia, ya que he estado bastante liada de trabajo. Pero bueno, hoy nos hemos conectado y nos ponemos al día. El jueves David se fue a Liverpool, que le ha salido un currito dando clases en el Liverpool Film & HD Workshops. Claro, pues ya le he puesto en contacto con nuestro malagueño afincado en tierras Scouse, Koki, que seguro que si ya han quedado se estarán recorriendo juntos todos los pubs de la zona. Vamos, como si los estuviera viendo...
Y lo que más arte tiene esto de ser malagueño en el mundo es, aparte de poder compartir tu día a día con nuestra Málaga y ponerte al día de lo que se cuece en casa y lo que hacen otros malagueños en distintas partes del globo, la de amistades que se están creando por medio de este sistema de comunicación. Sin ir más lejos, la visita que tuvimos en agosto de 2 lectores, Manolo y María, lo bien que lo pasamos en Brooklyn y que ahora somos amigos. Probablemente si no existiese este medio de comunicación, no hubiéramos coincidido en la vida.
Y hoy ha sido otro día de quedar con un malagueño. Esta vez he quedado con Antonio, que como muchos sabreis por su blog, 4 Andaluces en la Sucursal del Paraíso, se fue de Málaga a Colombia, con el propósito de ayudar a proporcionar viviendas dignas en este país.
Pues nada, por medio del blog, me comentó que venía a Nueva York a ver su chica, Alba, y como hacemos en Málaga, pues quedamos a echar algo. ¿No vamos a quedar? Total, que quedamos en Jackson Heights para ir a comer. Coordinación con los móviles (¿qué haríamos sin ellos?) ya que, para no variar, con mi despiste habitual les estaba esperando en la esquina equivocada. Paseamos por Roosevelt Avenue, con un poquito de lluvia, bajo las vías del metro 7 y nos dejamos guiar por Alba, que vive en Queens.
Tengo que admitir que, a pesar de que llevo 9 años viviendo en Nueva York, todavía me queda mucho por conocer de esta ciudad y Queens es una de mis asignaturas pendientes, sobre todo a nivel gastronómico, ya que tiene barrios con una población muy variada, que va desde las diferentes comunidades hispanas de Jackson Heights, a los griegos de Astoria, los chinos de Flushing o los judíos de Forest Hills. Y en cada una de estas barriadas, encuentras restaurantes, panaderías y tiendas de ultramarinos que ofrecen la comida propia de la tierra de cada una de estas comunidades.
Alba nos llevó al Mesón Asturias, un restaurante asturiano que lleva 30 años abierto en esta zona de Queens, y que es uno de los lugares de reunión del Centro Asturiano de Nueva York. Precisamente hoy, cuando entramos a comer, tenían la reunión anual del Centro en el Mesón Asturias y dio la casualidad de que me encontré allí a una amiga, que es la vicepresidenta de dicha asociación. Lo dicho, si es que hasta Nueva York es un pañuelo...
Total, que Antonio, Alba y yo nos pusimos con el tapeo: tortilla, croquetas de bacalao y boquerones en vinagre (ya sé que algunos pensarán en el dichoso anisakis, pero es que los boquerones en vinagre me pueden...) y luego una fabada que quitaba er sentío. Todo regado con sidra y muy buena conversación. Total, comida con sobremesa de 4 horas que se nos pasaron volando.
Lo más gracioso era como si Antonio, Alba y yo nos conociésemos de toda la vida. Una sensación de estar en casa, a pesar de la distancia. Echamos una tarde muy buena, hablando del proyecto de Antonio en Colombia (muy interesante), de la vida en Colombia, en Nueva York y en Málaga; de las diferencia del español de Colombia con el de Málaga (cómo nos reímos con eso); y por supuesto, de nuestra Málaga, le explicamos a Alba (que es colombiana) los barrios de donde venimos Antonio (del centro) y yo (de El Palo); hablamos sobre nuestra Semana Santa, ya que tanto Antonio como yo somos muy semana-santeros, él lleva años sacando la Virgen del Rosario, de la Hermandad de la Sentencia, y yo recordando los itinerarios de Semana Santa con mis amigos, buscando el mejor sitio para ver tal o cual trono.
Me ha encantado encontrarme con un compadre en Nueva York, reirnos con historias que sólo un malagueño puede entender y pasar la tarde con muy buena gente. Y todo esto se lo debemos, en gran parte, a este proyecto del Sur, el de Malagueños en el mundo. ¡Gracias por acercarnos a todos los malagueños en cualquier lugar en el que estemos!
Mesón Asturias
40-12 83 St
Elmhurst, NY 11373
Tel: (718) 446-9154
Llevo unas semanas desconectada y no por voluntad propia, ya que he estado bastante liada de trabajo. Pero bueno, hoy nos hemos conectado y nos ponemos al día. El jueves David se fue a Liverpool, que le ha salido un currito dando clases en el Liverpool Film & HD Workshops. Claro, pues ya le he puesto en contacto con nuestro malagueño afincado en tierras Scouse, Koki, que seguro que si ya han quedado se estarán recorriendo juntos todos los pubs de la zona. Vamos, como si los estuviera viendo...
Y lo que más arte tiene esto de ser malagueño en el mundo es, aparte de poder compartir tu día a día con nuestra Málaga y ponerte al día de lo que se cuece en casa y lo que hacen otros malagueños en distintas partes del globo, la de amistades que se están creando por medio de este sistema de comunicación. Sin ir más lejos, la visita que tuvimos en agosto de 2 lectores, Manolo y María, lo bien que lo pasamos en Brooklyn y que ahora somos amigos. Probablemente si no existiese este medio de comunicación, no hubiéramos coincidido en la vida.
Y hoy ha sido otro día de quedar con un malagueño. Esta vez he quedado con Antonio, que como muchos sabreis por su blog, 4 Andaluces en la Sucursal del Paraíso, se fue de Málaga a Colombia, con el propósito de ayudar a proporcionar viviendas dignas en este país.
Pues nada, por medio del blog, me comentó que venía a Nueva York a ver su chica, Alba, y como hacemos en Málaga, pues quedamos a echar algo. ¿No vamos a quedar? Total, que quedamos en Jackson Heights para ir a comer. Coordinación con los móviles (¿qué haríamos sin ellos?) ya que, para no variar, con mi despiste habitual les estaba esperando en la esquina equivocada. Paseamos por Roosevelt Avenue, con un poquito de lluvia, bajo las vías del metro 7 y nos dejamos guiar por Alba, que vive en Queens.
Tengo que admitir que, a pesar de que llevo 9 años viviendo en Nueva York, todavía me queda mucho por conocer de esta ciudad y Queens es una de mis asignaturas pendientes, sobre todo a nivel gastronómico, ya que tiene barrios con una población muy variada, que va desde las diferentes comunidades hispanas de Jackson Heights, a los griegos de Astoria, los chinos de Flushing o los judíos de Forest Hills. Y en cada una de estas barriadas, encuentras restaurantes, panaderías y tiendas de ultramarinos que ofrecen la comida propia de la tierra de cada una de estas comunidades.
Alba nos llevó al Mesón Asturias, un restaurante asturiano que lleva 30 años abierto en esta zona de Queens, y que es uno de los lugares de reunión del Centro Asturiano de Nueva York. Precisamente hoy, cuando entramos a comer, tenían la reunión anual del Centro en el Mesón Asturias y dio la casualidad de que me encontré allí a una amiga, que es la vicepresidenta de dicha asociación. Lo dicho, si es que hasta Nueva York es un pañuelo...
Total, que Antonio, Alba y yo nos pusimos con el tapeo: tortilla, croquetas de bacalao y boquerones en vinagre (ya sé que algunos pensarán en el dichoso anisakis, pero es que los boquerones en vinagre me pueden...) y luego una fabada que quitaba er sentío. Todo regado con sidra y muy buena conversación. Total, comida con sobremesa de 4 horas que se nos pasaron volando.
Lo más gracioso era como si Antonio, Alba y yo nos conociésemos de toda la vida. Una sensación de estar en casa, a pesar de la distancia. Echamos una tarde muy buena, hablando del proyecto de Antonio en Colombia (muy interesante), de la vida en Colombia, en Nueva York y en Málaga; de las diferencia del español de Colombia con el de Málaga (cómo nos reímos con eso); y por supuesto, de nuestra Málaga, le explicamos a Alba (que es colombiana) los barrios de donde venimos Antonio (del centro) y yo (de El Palo); hablamos sobre nuestra Semana Santa, ya que tanto Antonio como yo somos muy semana-santeros, él lleva años sacando la Virgen del Rosario, de la Hermandad de la Sentencia, y yo recordando los itinerarios de Semana Santa con mis amigos, buscando el mejor sitio para ver tal o cual trono.
Me ha encantado encontrarme con un compadre en Nueva York, reirnos con historias que sólo un malagueño puede entender y pasar la tarde con muy buena gente. Y todo esto se lo debemos, en gran parte, a este proyecto del Sur, el de Malagueños en el mundo. ¡Gracias por acercarnos a todos los malagueños en cualquier lugar en el que estemos!
Mesón Asturias
40-12 83 St
Elmhurst, NY 11373
Tel: (718) 446-9154